
El dolor y la conmoción siguen hoy en millones de personas dentro y fuera de EE.UU. que reaccionan con gran pesar, e incluso con incredulidad, ante el trágico deceso del mítico baloncestista Kobe Bryant.
La ciudad norteamericana de Los Ángeles, California, debió estar
enfocada fundamentalmente en la música, el glamour y el desfile de
figuras que asistieron a una nueva ceremonia de entrega de los premios
Grammy, que otorga cada año la Academia Nacional de Artes y Ciencias de
la Grabación.
Sin embargo, a pesar del espectáculo y de la celebración de
galardones, el ambiente dentro del Staples Center de esa urbe fue
solemne y marcado por el tributo a la exestrella de Lakers de Los
Ángeles, de la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA).
Bryant, uno de los mejores exponentes de las canastas de todos los
tiempos, perdió la vida ayer en un accidente de helicóptero en
Calabasas, California, junto a otras ocho personas, entre ellas su hija
Gianna, de 13 años de edad.
Mientras en el interior de la arena donde se celebró la ceremonia de los Grammy muchos participantes rindieron tributo a Black Mamba, con una carrera de 20 temporadas al máximo nivel, el principal homenaje estuvo en los exteriores del lugar.
Tras conocerse la noticia de la tragedia, cientos de fanáticos se
congregaron en las afueras del Staples Center, sede de Lakers, cuyo
uniforme Bryant vistió desde 1996 hasta su retiro en 2016.
Durante esa etapa, el jugador nacido en Filadelfia, Pensilvania, el
23 de agosto de 1978, se coronó cinco veces campeón en la NBA y fue
convocado a 18 Juegos de las Estrellas.
Con los números ocho y 24 en la espalda, retirados a la vez en
diciembre de 2017 por su club de siempre, algo inédito hasta entonces,
Bryant marcó 33 mil 643 puntos, actualmente el cuarto mejor registro de
la historia.
Aunque el acceso al Staples Center estaba cerrado al público debido a
la gala de los referidos premios, las personas se reunieron en el
complejo L.A. Live, ubicado al frente, y erigieron un altar con velas y
flores que fue creciendo a medida que pasaron las horas.
Grandes fotos de la exestrella, que reinó en los Juegos Olímpicos de
Beijing ´2008 y Londres ´2012, se exhibieron en monitores, y las
lágrimas y la tristeza resultaron evidentes en los aficionados, como
mismo ocurrió en muchos jugadores, entre ellos LeBron James, el
principal referente de esta disciplina en la actualidad.
También, los fanáticos portaron chaquetas y camisetas con los
dorsales del fallecido, y hubo gritos de ‘Gracias, Kobe’ y ‘MVP’ (siglas
en inglés de Jugador Más Valioso).
Estamos parados aquí, desconsolados, en la casa que construyó Kobe
Bryant, expresó la cantante estadounidense Alicia Keys como presentadora
de la ceremonia de los Grammy.
Keys interpretó a capela la canción It´s So Hard to Say Goodbye To
Yesterday (Es tan difícil de decir adiós al ayer), un éxito de 1991 del
grupo Boyz II Men, que se unió a ella en el escenario.
Incontables figuras del mundo del deporte, el arte, el
entretenimiento y la política mostraron profundo dolor por la partida
física del baloncestista.
‘La familia de la NBA está devastada por el trágico fallecimiento de
Kobe Bryant y su hija Gianna. Durante 20 temporadas, Kobe nos mostró lo
que es posible cuando el talento notable se combina con una absoluta
devoción por ganar’, expuso en un comunicado el comisionado Adam Silver.
No hay palabras para expresar el dolor que estoy atravesando con esta
tragedia de perder a mi sobrina Gigi y mi hermano Kobe Bryant. Te amo y
te extrañaremos, escribió en la red social Shaquille O´Neal, otrora
compañero de equipo del occiso.
Fue un fiero competidor, uno de los grandes del juego y una fuerza
creativa, aseguró sobre Bryant en un comunicado Michael Jordan,
considerado por muchos el mejor baloncestista de todas las épocas.
Por otra parte, el afamado expelotero de Yankees de Nueva York de las
Grandes Ligas de Béisbol Derek Jeter resaltó en la Tribuna de los
Jugadores, una plataforma que cuenta historias de deportistas en primera
persona, que Bryant constituyó un ser muy familiar por sobre todas las
cosas. A lo largo de nuestra amistad, las conversaciones más
significativas que tuvimos siempre fueron sobre la familia, escribió el
seleccionado hace seis días al Salón de la Fama de su deporte, con sede
en Cooperstown, Nueva York.
Destacó que en los momentos con Bryant, el baloncestista nunca habló
de cuán talentoso era, su obsesión por ser un campeón o ‘el asesino
absoluto con una pelota en las manos’.
‘Realmente no habló de nada de eso. Le importaba mucho más ser el esposo de Vanessa y el padre de sus hijas. Amaba a su familia, era su familia. Eso es lo importante’, recalcó el antiguo defensor del campo corto. (Tomado de Cubasí)